- TAREA 1: ACTIVIDAD DE HÉROE Y VILLANO: en esta actividad en la que el alumno debía hacer una descripción de un héroe y un villano, otorgándoles súperpoderes y otras características; el alumno con Dislexia puede presentar dificultades a la hora de realizar la descripción si la información no es precisa y ajustada y, si requiere un alto componente verbal.
Va a ser necesario con este alumnado y en este tipo de tareas que la metodología se base en una adecuada presentación de la actividad, es decir, hay que utilizar un tamaño mínimo de 14 puntos, letra de fuente Arial o Verdana, interlineado de 1'5 puntos, no utilizar letras cursivas, resaltar en negrita los puntos importantes y utilizar algún tipo de subrayador para las actividades más relevantes.
Es importante que no haya una gran cantidad de información, que sea precisa y clara y que se acompañe de una imagen, el alumno debe saber en cada momento a qué se está enfrentado. Hay que tratar de pasar por alto los errores ortográficos porque les supone un alto nivel de ansiedad el ver las faltas corregidas en rojo y guiar al alumno en cada momento de la tarea bajo la supervisión. Son alumnos muy creativos y con alto nivel de razonamiento lógico por lo que, con las pautas adecuadas podrán realizar la tarea sin ningún tipo de dificultad.
- TAREA 2: SHERLOCK HOLMES: en esta actividad en grupos heterogéneos, cada componente del grupo asumía un rol en la realización de la actividad. Si el alumno presenta Dislexia los roles no compatibles serían el de elaborar la presentación o el de escribir la presentación o incluso no lo pasaría demasiado bien si tuviera que ser el portavoz del grupo y hacer la exposición de la tarea.
Sin embargo, el niño con dislexia en la realización de esta actividad puede sobresalir y destacar en la búsqueda de la información, en analizar y sintentizar o resumir la información más relevante, en extraer lo verdaderamente necesario en memorizar y recordar la información y ver más allá de lo que los demás normalmente podemos ver.
En definitiva, cada alumno que integra una clase precisa de una atención educativa individualizada y personalizada que le permita avanzar en su proceso de aprendizaje y, al mismo tiempo, reducir su exclusión. Dentro de las aulas debemos favorecer el aprendizaje inclusivo y de calidad, fomentar la convivencia, potenciar las habilidades de nuestros alumnos y compensar al mismo tiempo las que se encuentran más deficitarias, aprender les debe permitir investigar, buscar, emprender, criticar, pero sobre todo les debe gustar y deben estar motivados para ello.
Es por lo que, resulta imprescindible realizar una observación continuada y exhaustiva de nuestro alumnado, ver qué funciona y qué no está funcionando, qué capacidades se encuentran más desarrolladas y cuáles no, dónde hay que hacer más incidencia, en qué destacan, cuáles son sus intereses, sus preocupaciones, etcétera.
Hay que permitir que cometan el error, que se frustren en las tareas porque estas situaciones les enseñan a levantarse y a seguir, hay que reforzar y cuidar su autoestima, tienen que adquirir estrategias para trabajar en grupo, para compartir sus ideas, experiencias, vivencias y también, aprender a valorar las de los demás.
El aula debe ser un lugar donde nuestros alumnos se sientan cómodos y seguros, donde experimenten, se emocionen y descubran, desde la práctica funcional y generalizable; siendo nosotros sus guías en este proceso y estando ahí para cuando nos necesiten en colaboración con sus familias o representantes legales y con otros servicios externos que puedan estar interviniendo con ellos.
El aula debe ser un espacio de creación, investigación, innovación, donde cada alumno ponga en juego su talento y sea compartido por el resto; es por lo que, resulta imprescindible y necesario que en primer lugar evaluemos su aprendizaje y sus conocimientos y destrezas de manera adecuada.
Un saludo,
Miriam

